El Decreto de Emergencia Económica del Presidente de la República, que fuera rechazado por la Asamblea Nacional el pasado 22 de enero de 2015, establece como objetivos “estimular la inversión extranjera” y “requerir” a las empresas públicas y privadas “incrementar sus niveles de producción”, pero no indica las medidas para lograrlo, ni cómo se implementarían. Discurso bipolar sobre la empresa privada frena inversión en Venezuela