A principios del mes de octubre, 11 magistrados anunciaron su deseo de jubilarse del Tribunal Supremo de Justicia venezolano, según reseñó El Universal (El Universal), sin embargo, el número aumentó y es el 16 de octubre cuando 13 magistrados firman su jubilación (El Nacional). La selección de los nuevos funcionarios para sustituir las vacantes del TSJ está en pleno desarrollo, pero el proceso que se está siguiendo si bien obedece a la Ley Orgánica del TSJ (2010) viola procedimientos establecidos en la Constitución (1999).
Análisis Acceso a la Justicia
Para Acceso a la Justicia resulta preocupante observar cómo en Venezuela hay leyes que cambian radicalmente lo establecido en la Constitución del 99, que hoy parece desdibujarse en medio de los tintes políticos y las discusiones técnicas que ocultan el verdadero matiz de los cambios, y el impacto que a mediano plazo pueden tener en la vida diaria del venezolano.
De lo anterior queda claro que en la ley no se garantiza que el proceso esté libre de la influencia política y de la parcialidad de un grupo, es más, facilita ambas. Fuente: Elaboración propia
¿Y a ti venezolano cómo te afecta?
Así como la Asamblea Nacional cambió la Constitución por una ley, en este caso la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia, lo puede hacer por medio de cualquier otra ley afectando tus derechos humanos, establecidos en la Constitución. Por ello, este caso es un precedente peligroso para los venezolanos.
Si en Venezuela el pueblo gobierna, ¿por qué cuando la Constitución prevé que él participe directamente en un proceso político, como es la selección de los magistrados del TSJ, el poder político no lo deja?
¿Por qué la Asamblea Nacional se esmera en tener control directo sobre ese proceso con diputados y además, se apropia del Comité de Postulaciones haciéndolo un órgano suyo cuando no lo es según la Constitución?
Quizás sea por la gran importancia que tiene el TSJ, el cual puede anular una ley de la Asamblea Nacional que viole la Constitución e incluso tus derechos humanos como venezolano. El problema es que si el Tribunal Supremo de Justicia está controlado políticamente (o sea, no es independiente) ¿cómo va a ejercer su papel?